La realidad de las cosas no siempre es evidente a primera vista.

martes, 30 de junio de 2009

Aclaraciones antes del evangelio

1) Los votos nulos contados y asentados en el acta de resultados en la casilla en lo inmediato forman parte de la votación total emitida (votos válidos, nulos y por candidatos no registrados) y no afectan la votación ni su validez porque en este país gana el/la candidato del partido que recibe mayor votación (en número o porcentaje) para un cargo de elección popular. Esto significa que el sistema está diseñado para soportar un abstencionismo y la anulación de la votación (por error o por convicción)

2) Los votos nulos en una casilla no tienen qué ver con el porcentaje mínimo para mantener el registro de los partidos porque la referencia que se toma es la votación total válida (que se tiene restando los votos anulados y los emitidos a favor de un candidato no registrado en la boleta) y en consecuencia, tampoco afectan el reparto del financiamiento público.
3) Los votos nulos en la casilla sì afectan el reparto de los cargos públicos de representación proporcional (legislativo y municipal) porque el porcentaje que se toma se refiere a la votación total emitida. En Jalisco el % mìnimo para entrar al reparto de representación proporcional es de 3.5%, con lo que, al haber altìsimos votos nulos (como se espera) tendrá el efecto de que los partidos pequeños queden fuera de la integración de los órganos públicos colegiados (diputados y municipios) Prevalecerán de esta forma el PAN, el PRI y en algunos casos el PRD y el Partido Verde. No sé qué tan bueno o malo sea esto, pero una regla democrática es que las minorías estén representadas en los órganos de gobierno.
4) Los votos nulos de los ciudadanos/as a que se refiere el mensaje que anexaste se refieren a la votación considerada como no válida por los tribunales electorales para efectos declarar al candidato ganador en una elección impugnada en un juicio de inconformidad (o como se llame en cada estado) o la revisión constitucional que conoce la Sala Superior del Tribunal Federal Electoral cuando un partido se inconformó de los resultados por alguna de las causas previstas en la ley. Para mayor claridad, llamaré a estos, los votos anulados por los tribunales electorales. Esto significa que lo del 20% de votos nulos de los ciudadanos que se mencionan, no opera por los votos nulos de las actas de votación en las casillas, sin más, sino que se originan en incidentes ocurridos en la jornada electoral o en las actas de la votación o al aplicar `mal las fórmulas de asignación en la representación proporcional. Quien difunde esta confusión, quien la acepta y quien actúa conforme a ella muestra un rumbo errático en algunos conceptos (práctico, legal, político, republicano, democrático) Si sobre esta idea basan su propuesta el sector del voto nulo, vamos mal (ya hasta tuvieron una reunión nacional y su presencia en los medios no es pequeña) La figura del recuento total de votos en una casilla actualmente vigente en nuestro sistema electoral proviene precísamente de un capítulo de nuestra histórica política en que frente a las evidencias del fraude en una elección presidencial federal se pedía contar "voto por voto, casilla por casilla" y nunca se hizo, acusando de "locos" a quienes reclamaban el recuento total. (¿Remember that?)
5) Hay sectores sociales, económicos y políticos en el pueblo que están inconformes con las facciones en los partidos políticos, se quejan de un mal desempeño de partidos (todos) y muchos de sus gobernantes; señalan que las reglas de participación política, de competencia por el gobierno a´través del voto son cualquier cosa menos democráticas. Si es correcto esto, estamos ante una crisis del sistema republicano y no es poca cosa. De no dar cause a esta situación se abre la posibilidad de represión, fraude, dictadura simulada e incluso a la violencia social y política.
6) Si la gente se abstiene de ir a votar, sus razones tendrá. Si la gente se presenta a la casilla a anular (o a preguntar si está en el listado nominal y a continuación se retira sin votar) depende de sus convicciones. Es probable que entre la abstención y el voto nulo se haga una cantidad importante de ciudadanos/as del listado nominal que muestren su rechazo al actual sistema y desempeño de gobiernos y partidos. Gane quien gane (con el porcentaje menor posible de los votos) tendrá la grave responsabilidad de enfrentar la crisis política que se evidencia y darle un cause en beneficio del pueblo mexicano.
7) Las respuestas sociales y políticas organizadas para resolver los grandes problemas de un pueblo, son preferibles que las respuestas espontáneas, afectivas pueden ser inciertas e incongruentes entre su intención y sus implicaciones prácticas. El mero enojo social (manifestado en ir a una casilla y anular el propio voto, además de propalar la propuesta) no garantiza mayor impacto que el saber cuántas personas están molestas con la política y fueron a anular su voto. Fuera de presionar a las minorías a desaparecer, no se ve cómo de manera efectiva incida en la marcha del gobierno ganador.
8) ¿Necesitamos nuevas reglas republicanas de acceso al poder público? ¿Necesitamos nuevas reglas, restricciones e incentivos para el gobierno y los partidos? ¿Necesitamos una forma legal, rápida y segura para echar del poder a funcionarios /as corruptos, fraudulentos, delincuenciales, ineptos, groseros, iluminados, borrachos y abusivos? No lo sé. Probablemente sí.

Es preciso cierta congruencia entre el problema identificado y el propuesto para resolver con los medios idóneos y darles seguimiento. La propuesta del voto nulo parte del supuesto de que es necesario que el sistema colapse para levantar un nuevo pacto nacional político. Esa misma idea la sostienen otros sectores que no necesariamente consideran al voto nulo como vía para llegar ahí, sino más bien una vía basada en la crítica, la participación y la generación nuevos actores sociales y colectivos (o el reforzamiento de otros existentes, distintos a aquellos que han mostrado incapacidad para lograr el cambio necesario)

Muevas reglas políticas: comencemos a procesar las nuevas reglas que queremos y generemos los espacios en todo el país para que las vayan impulsando a través (por encima, por abajo o contra) de los partidos:

Segunda vuelta electoral para garantizar mayorías genuinas y minorías atendidas
Revocación de mandato (fuera los ´gobernadores no idóneos)
Rendición de cuentas y responsabilidad por logros de planes de desarrollo y programas de gobierno
Referendum (ejecutivo), plebiscito (legislativo), iniciativa popular para abrir causes
Participación ciudadana por sectores
Servicio Civil de Carrera para profesionalizar el gobierno

Y de ahí a lo que siga... Esperemos lo que sigue y pongamos lo que cada quien desde su ámbito y su perspectiva pueda ayudar a que este país salga bien librado de esta prueba democrática.

Esta es, palabra de Miux

Guillermo Ortiz V.

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